Ayer, el pastor Joan Medrano nos comunicaba la partida a la casa del Padre de nuestro hermano y compañero, Ángel Custodio Burgos. Calificar la noticia de triste, es decir poco. Ángel deja un hueco insustituible en su familia, y también, cómo no, en nuestra Iglesia: ha sido un don de la gracia de Dios para todos los que le hemos conocido.
Él fue un vivo testimonio de lo que nuestro Señor Jesucristo puede hacer con alguien que incondicionalmente se pone en su manos. Como escribe la directora de El Faro, Débora Rodríguez: Ángel era una “persona afable, responsable, entregada, directa y con un saber hacer que pocos podrán imitar porque mires a donde mires, la huella de su ministerio ha quedado impregnada en la vida de muchas personas”.
En la Església Evangèlica de Catalunya – IEE estamos agradecidos a Dios por su trabajo y entrega por la causa del Reino de Dios a través de su ministerio en El Faro, el Departamento de Adolescentes de nuestra iglesia, los campamentos en Aiguaviva… y así podríamos seguir enumerando su extenso e intenso trabajo. Pero sobre todas las cosas damos gracias a Dios por su persona y su familia.
Deseo recordar unas palabras del teólogo protestante Karl Barth, cuando escribió: “La meta de la vida humana no es la muerte, sino la resurrección”. Y desde la bendita esperanza de la resurrección, oramos para que el Dios de toda misericordia consuele, en estos momentos de dolor, a su esposa e hijos, y nos ayude a todos nosotros a seguir el ejemplo indeleble que Ángel nos deja.
Acabo citando unas palabras del pastor Sebastián Rodríguez: “Tras la muerte, la vida… sin las ataduras de lo terreno […] Y a los que quedamos, Dios nos ha dejado un legado que espero no rechacéis… la fe, la esperanza y el amor”.
Ignacio Simal Camps, pastor y Presidente de la Mesa de l’Església Evangèlica de Catalunya
Ángel para mí personalmente fue, a sido, y será la persona más maravillosa que conocí, cuando todas las personas me dieron la espalda el con su gran amor me abrio sus brazos. Ángel te quiero hoy mañana y siempre. Esperame